Inauguración de servicio de ecografía en la Unidad 5 de Montevideo, impulsado por Proyecto Crisálidas
El pasado 3 de abril se puso en marcha el nuevo servicio de ecografías en la Unidad 5 de Montevideo, gracias a una donación realizada por el Proyecto Crisálidas, gestionado por la Universidad CLAEH. Esta iniciativa representa un avance fundamental en el acceso a la salud pública para las mujeres privadas de libertad, y marca un nuevo hito en la articulación entre instituciones, academia y cooperación internacional.
Más de 900 mujeres de las Unidades 5 y 9 se verán beneficiadas por esta incorporación tecnológica. A la fecha de la inauguración, ya se encuentran 90 mujeres en lista de espera para ser atendidas.
El ecógrafo multimodal, financiado por el Proyecto Crisálidas —una iniciativa ejecutada por la Universidad CLAEH y INCIDEM, con el apoyo de la Unión Europea— permitirá mejorar de forma sustancial el acceso a servicios de salud de calidad en contextos de encierro. Estará instalado en la Unidad 5 que tiene conexión directa con la Unidad 9 (que aloja a mujeres con hijos e hijas), y permitirá realizar estudios clave para la detección temprana de diversas patologías.
El acto contó con la presencia de la recientemente nombrada directora del Instituto Nacional de Rehabilitación (INR), Ana Juanche, acompañada de su equipo técnico; El Embajador de la Delegación de la Unión Europea en Uruguay, Paolo Berizzo y la asesora de cooperación Clelia de la Fuente. Por parte de la gerencia asistencial de ASSE, participó Gabriela Medina; y en representación del Sistema de Atención Integral a Personas Privadas de Libertad (SAI-PPL), estuvieron presentes Teresa Sanabria , Patricia Carreño.
También acompañaron la jornada el rector de la Universidad CLAEH, Carlos de Cores y el equipo de dirección de Proyecto Crisálidas, Marcelo Alfonzo y Germandy Pérez-Galeno. La ex subdirectora técnica del INR, Lourdes Salinas, quien ha seguido de cerca el Proyecto Crisálidas durante tres años; Paula Lacaño, referente del Departamento de Género y Diversidad del INR; la directora de la Unidad 9, operarios y operarias del equipo de salud, y la subdirectora de salud de la unidad.
Esta acción concreta es resultado del trabajo articulado entre academia, Estado y sociedad civil, y representa un nuevo hito en la búsqueda de condiciones de vida más dignas, equitativas y humanas para las mujeres privadas de libertad.






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