De vender atados de leña a vender camiones: la historia de tres leñeras que tuvieron apoyo de técnicas de UCLAEH
Inés tiene 50 años, Alexandra tiene 30 y Sandra, 54. Las tres viven en Tacuarembó y fueron apoyadas por técnicas de la Universidad CLAEH en el proceso de dejar de vender atados de leña en el almacén del barrio para pasar a vender varios camiones semanales.
En el inicio, estas mujeres ingresaban a los campos de Lumin y sacaban desechos de forestación (ramas y maderas de diámetro pequeño). Un día pidieron permiso a la empresa y esta contactó al Mides. El Mides las incorporó en el Programa de Emprendimientos Productivos y a través de ese programa recibieron el acompañamiento de dos técnicas de UCLAEH: Laura Viñas y María Menéndez.
“Los técnicos de UCLAEH hacen el acompañamiento durante seis meses de las personas que el Mides va derivando. Participan en este programa personas en situación de vulnerabilidad social y económica que tienen algún emprendimiento productivo: quiosquitos, gente que vende comida, tejedores… Estas mujeres tenían comercialización de leña”.
Lograron formalizarse como empresa y trabajar diferentes aspectos del negocio. “Les dimos apoyo para inscribirse como proveedoras del Estado, porque estaba la posibilidad de vender a la intendencia postes de eucaliptus para la construcción de invernáculos. Hubo un trabajo intenso en esas gestiones”, repasó Viñas.
Quincenalmente, además, tuvieron reuniones en las que se abordó con fuerza el concepto de trabajo colaborativo. En el camino, las leñeras, como les llaman, accedieron también a un préstamo de República Microfinanzas con condiciones beneficiosas. En los tres casos, compraron motosierras nuevas.
“El frigorífico Tacuarembó les empezó a compra leña y el negocio empezó a tomar otro porte”, repasó la técnica. El ingreso principal de los hogares pasó a ser el de ellas y en algunos casos se sumaron al negocio los hijos y las parejas. El cambio fue “muy significativo”, destacó Viñas.